Solo algunos animales tienen la capacidad de regenerarse, estos, son capaces de regenerar algunas células o tejidos después de haberlos perdido. Algunos de ellos son las estrellas de mar, los ajolotes, las hidras, las planarias y los lagartos; y aunque hay algunos de ellos que solo pueden regenerar una parte de su cuerpo, esto, marca la diferencia entre vivir o morir.
La reparación de estos tejidos o células es posible gracias al proceso natural de la apoptosis en el que cuándo las células mueren, otras las reemplazan. Este fenómeno ocurre normalmente en los animales que tienen una regeneración parcial, es decir, que solo una parte del miembro de su cuerpo se regenera.
Por otra parte, los animales que tienen una regeneración prácticamente completa de su miembro, llevan a cabo un proceso más complejo. En este proceso, un conjunto de células embrionarias denominadas blastemas ayudan a que el órgano o tejido se regenere; por lo tanto, la regeneración en animales depende de las células madre.
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